Los clásicos nunca mueren

"Yo soy goma, tú eres cola". Si te resulta familiar, bienvenido al mundo de los fanáticos del comúnmente denominado abandonware. Un nombre tan actual como despectivo, pues aún hoy, 15 o 20 años después del lanzamiento de la gran mayoría, somos muchos los que seguimos disfrutando más con esas míticas peleas de insultos que liquidando terroristas rusos con un AK-47. Hoy en día parece que el mercado de los videojuegos se han quedado sin ideas. De hecho, en el propio género shooter sigo decantándome por los primeros Call of Duty, a pesar de lo limitado de sus gráficos en contraste con el último Black Ops., con el que la crítica no ha sido demasiado benevolente. El 1 y el 2 marcaron un hito que no ha estado a la altura de sus sucesores. Y ahora pregunto, ¿dónde está la innovación señores? Podría haber limitadas excepciones, quizá nombrando a Assasins Creed o Heavy Rain, todo un thriller psicológico interactivo. Pero aún así carecen de esa picardía y humor, de esos puzzles que te llevaban días, de ese carisma que tendrán siempre Monkey Island 1 y 2. Dos clásicos que nunca pasarán de moda.